SUSCRIBETE

17 Julio 2025, Puebla, México.

Juicio oral... Otra historia verdadera / Günter Petrak

Cultura | Crónica | 28.MAY.2025

Juicio oral... Otra historia verdadera / Günter Petrak

Otra Historia Verdadera: 
Apenas tenía doce años de edad cuando fui llevado a juicio. 
1970, como boy scout no formé parte de la manada de “lobatos”, sino que ingresé directamente a la “tropa”. La experiencia adquirida con mi padre, cuando salíamos de campamento y de cacería, me permitió ser considerado para participar en un encuentro nacional de “guías de patrulla” aunque aún no había alcanzado ese rango. El evento tuvo lugar en el parque Los Dinamos, en el Ajusco, estado de México. La libreta de mi memoria ha perdido hojas y con ellas algunos episodios, no recuerdo, por ejemplo, cómo llegué al Distrito Federal, ni dónde estaba ubicada la casa en la que me dieron alojamiento, sólo guardo algunas imágenes borrosas de la litera que compartí con un compañero, de la impresión que me causó ver por primera vez en mi vida una televisión a color y de una ceremonia frente a un monumento a la madre en algún parque… Virginia Woolf dijo alguna vez que "la memoria es un espejo opaco y vuelto añicos, o, mejor dicho, es un espejo que ha sido oscurecido por el tiempo." Y el Tiempo se ha ensañado conmigo; pero, pervivo, insisto, y busco en los baúles y las bolsas, entre las hojas de los libros y los almanaques, en el calendario de mi alma infantil que también ha perdido hojas… y entonces me encuentro en el bosque, con el uniforme de niño explorador, subiendo la montaña, viendo cómo buena parte de la tropa se adelanta y yo, rezagado, miro hacia atrás y abajo, donde está sentado un grupo de compañeros. Uno de ellos se ha enfermado y los demás lo cuidan. Entonces, sin consultar, tomo la decisión de continuar cuesta arriba. Le aviso a los demás que iré por ayuda. Tardo casi una hora, busco a mi jefe de tropa y lo pongo al tanto de la situación. Me pregunta por qué opté por abandonar al grupo. “Vine por ayuda”, le contesto, pero hace un gesto de enfado. Las escenas siguientes se han borrado, el espejo está lleno de humo, salto al episodio de la Corte de Honor, de regreso a Puebla. Me defiendo, “lo hice por mis compañeros”. ―Si hubiera sido así, te hubieras quedado con ellos― dice el juez, y continúa ―te pusiste en peligro, si te hubieras perdido, nos hubiéramos tenido que movilizar en tu búsqueda―. Se me castigó, no recuerdo la condena; pero quizá aprendí la lección, quizá esa fue la razón por la que decidí permanecer con mi amigo Droopy, arriesgando la vida de ambos, en aquel viaje al Telapón que compartí en mi historia verdadera: Ascender, descender, volver… Y ahí siguen, perdidos / Günter Petrak | MundoNuestro - Periodismo Narrativo 2025 y https://mexicoprioridad.com/ascender-descender-volver/