SUSCRIBETE

7 Septiembre 2024, Puebla, México.

 A las Yaocíhuatl, a las mujeres guerreras / Gerardo Pérez Muñoz

Cultura /Sociedad | Opinión | 6.SEP.2023

 A las Yaocíhuatl, a las mujeres guerreras / Gerardo Pérez Muñoz

                  

Por la libertad de mi pueblo he renunciado a todo. No veré florecer a mis hijos. Micaela Bastidas Puyucahua

                                                                         

Si revisamos nuestra historia y la historia de nuestro continente, nos daremos cuenta que está plagada de próceres hombres. Hidalgo y Morelos en nuestro caso, Simón Bolívar y José de San Martín, libertadores de Venezuela, Colombia, Argentina y Perú. Bernardo O’Higgins en Chile y José Martí en Cuba, sólo para poner unos ejemplos. En ese mundo y constelación de hombres, se les ha dado un segundo lugar a las mujeres, cuando ellas jugaron un papel importante y trascendental en los procesos de independencia de sus países, tales fueron los casos de Josefa Ortiz de Domínguez, doña Leona Vicario y en especial, de doña María Ignacia Rodríguez de Velasco, mejor conocida como la Güera Rodríguez. No podemos olvidar a la Boliviana-Argentina Juana Azurduy y la Venezolana, doña Manuelita Sáenz Aizpuru; la Chilena Francisca Javiera Carrera Verdugo, etc. La gran mayoría de ellas fueron mujeres de descendencia criolla o criollo-mestizas lo que no minimiza en nada su participación. Poco, muy poco se ha documentado, escrito y reivindicado el papel relevante que han jugado las mujeres indígenas y campesinas, desde la conquista hasta nuestros días, en los procesos de lucha y liberación de sus países; En concordancia con esto, se le ha dado poca importancia al Día Internacional de las Mujeres Indígenas, lo que denota en el fondo y no tan en el fondo, un gran racismo,  discriminación, misoginia e ignorancia, sobre este sector social, que carga con su triple condición: ser mujeres, indígenas y pobres. Este sector social, ha sido también ignorado por la historia oficial y la academia y en no pocas luchas feministas actuales.

También puedes leer sobre el tema este texto de Gerardo  Pérez Muñoz

Testimonios de mujeres indígenas defensoras de su territorio y la vida

 Pensemos que las mujeres fueron factor clave como negociadoras políticas, mediadoras de conflictos, comandantes y dirigentes de batallas, combatientes (por lo general disfrazadas de hombres), consejeras intelectuales, estrategas políticas y militares, espías, mensajeras, propagandistas, y también en roles tradicionales pero muy necesarios como, cocineras, lavanderas y enfermeras (Del Palacio, Celia. Adictas a la insurgencia. Las mujeres de la guerra de independencia.)

 Día de las Mujeres Indígenas. Desde hace 40 años, cada 5 de septiembre se conmemora el Día de la Mujer Indígena. La fecha se eligió en honor de Bartolina Sisa, mujer aymara, compañera de Julián Apaza, mejor conocido como Túpac Katari. Bartolina enfrentó al ejército invasor y se opuso a la conquista y a la dominación colonial española. A sus 32 años, en 1782, Bartolina fue tomada presa, arrastrada por un caballo y amarrada de los pies, fue descuartizada. Las autoridades españolas clavaron su cabeza y extremidades como escarmiento en diferentes partes de la Paz, Bolivia. La conmemoración de esta fecha fue un acuerdo del Segundo Encuentro de Organizaciones y Movimientos de América en 1983 llevado a cabo en Tiahuanaco, Bolivia. El objetivo de la conmemoración es rendir tributo a todas las mujeres indígenas del mundo por sus luchas, logros y sueños. Tres años antes, en 1980, se fundó con su nombre la Federación de Mujeres Campesinas Bartolina Sisa con el propósito de reclamar que las mujeres de las áreas rurales participarán plenamente en la toma de decisiones políticas, económicas y sociales de Bolivia. A Bartolina Sisa hay que sumar los nombres de otras mujeres indígenas y afrodescendientes que lucharon en contra de la opresión y explotación de sus patrias e iguales de valientes y arriesgadas que Bartolina. Ejemplo, Micaela Bastidas Puyucahua, descendiente de africano e indígena. Gregoria Apaza, revolucionaria aymara quien junto a su cuñada Bartolina Sisa, lideró una de las más importantes rebeliones indígenas contra el dominio español en el Alto Perú. La cacica Tomasa Tito Condemayta, ejecutada en 1781. La rebelión de 1803 fue dirigida por doña Lorenza Abimañay, junto con Jacinta Juárez y Lorenza Peña, quienes encabezaron una rebelión de 10.000 indígenas en Ecuador en contra del pago de los tributos a la corona.

Especial atención merecen las Haitianas Suzanne Bélair quien fue teniente del ejército de Toussaint Louverture. Antes de que la decapitaran, Suzanne alcanzó a gritar ¡Viv libète! A ba esclavaj!” (¡Viva la libertad, abajo la esclavitud!). O la soldado Haitiana Marie-Jeanne Lamartinière, quien participó en la revolución antirracial y en la lucha por la independencia de su natal Haití.

Acerca de las luchas de las mujeres indígenas en nuestro continente, la académica Magdalena García Durán, ha dicho: No fueron brazos ejecutores de lo que opinaban y decían sus maridos o los varones de sus casas, sino que ellas mismas asumieron una posición política frente al proceso de la independencia de sus países.

 Nuestro país no lo podríamos entender sin la gran participación de las cientos o miles de mujeres que, silenciosamente y muchas veces en la sombra, participaron en la independencia, defensa de la república y contra la intervención Francesa y sobre todo, en la Revolución Mexicana. Solo por poner algunos ejemplos podemos nombrar a Antonia Nava, la Generala y a Manuela Medina, La Capitana. Durante la revolución mexicana jugaron un papel fundamental las llamadas soldaderas, rieleras, valentinas, adelitas y coronelas. La gran mayoría de ellas, de origen indígena, han quedado en el  anonimato. No podemos olvidar a la maya Elvia Carrillo Puerto, defensora de los derechos de la mujer.

Domitila Barrios de Chungara. México, 1975, Primera Conferencia Mundial de la Mujer. Irrumpe en su ceremoniosa y perfumada tribuna una mujer aimara y minera, rompiendo con el feminismo fashion y buena onda; doña Domitila Barrios quién cimbró la conferencia con una perspectiva clasista de la lucha feminista. Domitila denunció que la carta magna de las Naciones Unidas era aplicada solo para la burguesía y habló sobre la necesidad de rescatar la importancia de la lucha de la mujer obrera y campesina. Afirmó que la lucha de la mujer no podía ser contra el hombre, sino contra el sistema de dominación económica, política y cultural de los pueblos. Para ella el cambio debía darse mediante la igualdad de derechos de hombres y mujeres y el acceso igualitario a la educación y al trabajo, para emprender una lucha en pareja contra la opresión y la dominación del capitalismo. Debería ser una lucha conjunta de hombres y mujeres contra el sistema de explotación laboral. Sin duda, Domitila fue la estrella de la Conferencia.

Más cercana a nosotros, es digno de mencionar el importante papel que ha jugado, Doña Rosalinda Tuyuc, mayas q'eqchi', fundadora de la Coordinadora Nacional de Viudas de Guatemala (Conavigua). Las mujeres de la Coordinadora, en su gran mayoría de origen maya, le dieron a conocer a Guatemala y al mundo, el horror de las matanzas y las fosas comunes de los regímenes militares que han azotado a ese país hermano. A estas grandes mujeres indígenas se les debe el fin del reclutamiento militar forzoso que había en Guatemala y que afectó negativamente a generaciones enteras de adolescentes indígenas que fueron obligados a entrar en el ejército.

Otra líder indígena que trascendió sus fronteras, fue Berta Cáceres. Lideresa Hondureña del pueblo Lenca. Berta fue una ecologista que luchó por más de 20 años por los derechos de su pueblo y de la mujer. Fue co-fundadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh). En 2015 recibió el Premio Ambiental Goldman por su contribución en la lucha contra la construcción de una represa hidroeléctrica que amenazaba con desplazar a cientos de indígenas de Honduras. Fue asesinada en el 2016.  Una más es Alicia Cahuiya, (Hueya, guardiana del agua) de nacionalidad Waorani, una de las líderes que acaban de ganar la consulta en la defensa del Yasuní en Ecuador.

En nuestro país tenemos a la ganadora del Premio Goldman 2020, Leydy Pech. El Premio se le otorgó por su trabajo en contra de la siembra de soya transgénica en la Península de Yucatán y por la protección de las abejas. Doña Leydy es una de las cientos de mujeres indígenas que día a día y de sur a norte y de océano a océano, luchan defendiendo sus bosques, e agua, sus territorios y bienes comunes, Defienden la vida.

 

Nuestras Yaocíhuatl Poblanas

 

Doña Enedina Rosas Vélez, la presa política de Moreno Valle.

Doña Enedina nació en la comunidad nahua-campesina de San Felipe Xonaxayucan, municipio de Atlixco, Pue. Estudio hasta el tercer año de primaria y desde que tiene uso de razón se ha dedicado a las labores del campo, sembrando y cosechando maíz, chile, frijol y alfalfa. Doña quedó viuda desde hace más de 40 años y logró sacar adelante a su familia.

El domingo seis de abril del 2014, y después de salir de una asamblea de Comisariados Ejidales que se llevó a cabo en San José Teruel, en medio del campo, Doña Enedina se vio rodeada por policías fuertemente armados como si fuera una persona peligrosa y fue detenida. Iniciaba el viacrucis de las y los defensores de la tierra y el territorio a manos del Judas que gobernaba Puebla. Dice Doña Enedina que la aprehendieron peor que a un delincuente.

Los delitos que le imputaron gracias a la orden girada por el juez de Atlixco Elmo Mayoral fueron: obstrucción a la construcción de obra pública y el presunto robo de dos celulares denunciado por uno de los empleados de la compañía constructora Bonatti. Éste último cargo, un verdadero absurdo y un atentado a la inteligencia.

En su estancia en la cárcel siempre se mantuvo de pie y firme, pensando que si voy a salir de aquí será con la frente en alto y también pensando que mientras no me maten, yo estaré bien. Y sí, salió con la frente y la dignidad en alto. Dice doña Enedina que los licenciados, no piensan en la gente. No les interesan los niños. No comprenden a la gente mexicana. Sólo ven por sus negociazos y creen que con dinero todo lo pueden conseguir.

Las mujeres nahuas de Cuaxicala. En noviembre de 2012, las mujeres nahuas de la pequeña comunidad de Cuaxicala, Huauchinango, con machete en mano detuvieron las obras en el cerro del Yelotépetl, acusando al presidente auxiliar de ese entonces, de haberlas engañado para obtener sus firmas y permitir la destrucción de su cerro sagrado y ceremonial. También señalaron al ex director de la Comisión para el Desarrollo de los pueblos Indígenas (CDI) de Huauchinango quién les prometió asesoría y nunca llegó. Igualmente lo hicieron con el representante local y estatal de Culturas Populares Puebla, quién les ofreció apoyo y nunca les cumplió. Lo único que querían era detener la maquinaria pesada que estaba destruyendo su cerro. Sitio sagrado  en donde cada año realizan el senpantli (ofrenda a la madre tierra). La empresa que destruyó el cerro fue Gasomex Warner Field Services, S.A. de C.V. empresa subsidiaria de Pemex. Poco tiempo después, los integrantes de la comunidad se enteraron que la destrucción del cerró fue avalado por un arqueólogo del INAH quién dio la firma para el trazo. Las instituciones que hipotéticamente deben defender a los pueblos indígenas,  les dieron la espalda o bien, las y los traicionaron.

Las mujeres nahuas resumieron su lucha con la siguiente frase:

 La empresa no nos respeta, ellos están violando la ley. Antes éramos unas mudas, que teníamos miedo de hablar con los que tienen dinero o que están en las oficinas y usan corbatas, pero ahora les pedimos respeto para nuestro cerro, que no nos perjudiquen.

Es mucho lo que les debemos a las mujeres, en particular, a las mujeres indígenas, campesinas trabajadoras, obreras….En próximos artículos, volveremos al tema para dar a conocer las luchas y sueños de estas grandes mujeres a las que nos las hemos valorado plenamente.

Para no olvidar. Sin ser integrantes de los pueblos originarios ni tener antecedentes de trabajo a su favor, el coordinador de la bancada del PAN, Eduardo Alcántara Montiel y la diputada del PRI María Isabel Merlo Talavera ocupan una curul en el Congreso de Puebla que el Instituto Electoral del Estado (IEE) reservó a indígenas. (La Jornada de Oriente, Mónica Camacho.3 de Julio de 2022).  Eso en mi pueblo se llama fraude y es usurpación de identidad cultural. Y con gran cinismo, estos políticos, seguían y siguen en sus cargos. Por cierto, el próximo día 13 del presente mes, se cumplen 16 años que la Asamblea General de la ONU emitió la Declaración Universal de los Derechos de los Pueblos Indígenas. Declaración en la que se plasman los derechos de dichos pueblos. ¿Conocerán la Declaración este tipo de políticos?