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11 Diciembre 2024, Puebla, México.

  ¡Se puede vivir sin amor, pero no sin agua! / Gerardo Pérez Muñoz

Naturaleza y sociedad /Gobierno /Justicia /Sociedad civil organizada | Crónica | 7.NOV.2024

 ¡Se puede vivir sin amor, pero no sin agua! / Gerardo Pérez Muñoz

Tercera Asamblea de Pueblos Originarios en Defensa del Agua y la Vida, llevada a cabo en Santa María Acuexcomac

   

A la memoria de los compañeros que dieron la vida en su lucha por defender el agua y los ríos: Agustín Morante Romero, José Ramón Aniceto, Pascual Agustín, Antonio Esteban Cruz (2014), Manuel Gaspar (2018), Sergio Hernández y Héctor Colio (2021)

                                                                                Gerardo Pérez Muñoz

La frase que le da título al presente artículo, fue pronunciada por una joven y aguerrida mujer, Claudia L. de la comunidad de San Matías Cocoyotla, Cholula, casi al finalizar su participación en la Tercera Asamblea de Pueblos Originarios en Defensa del Agua y la Vida, llevada a cabo en Santa María Acuexcomac (lugar de agua o vasija donde brota el agua), Mpo. San Pedro Cholula. Poco a poco los participantes fueron llegando y llenando el auditorio en donde se llevó a cabo la Asamblea. Las y los participantes -las mujeres adultas con su mandil puesto- Iban llegando de sus distintas y en algunos casos, distantes comunidades. Las y los organizadores de la Asamblea ya los esperaban con comida, elemento de identidad cultural que se que convierte en un compartir comunitario.

 

La asamblea dio inicio con un ritual a los cuatro puntos cardinales y en especial, fue una petición y permiso a la madre tierra, nuestra Tonanzin Tlalli.  En varios momentos del ritual, se escuchó el sonido de la chirimía, el teponaxtle, el tambor y el inconfundible caracol. Un ritual contrastante de tipo prehispánico, frente a la iglesia católica dedicada a Santa María de la Asunción. Se escuchó decir a la persona que guio el ritual que “Todos somos aire, tierra y agua”, así mismo, pidió una reconciliación con la madre tierra.

 

El auditorio se llenó de hombres y mujeres de las comunidades de Acuexcomac, Tepontla, Coronango, Cuanalá, Zacatepec, Nextetelco, Almoloya, Tlautla, Tepalcatepec, Cacalotpec, Tlaxcalancingo, Olintla, Ocotpec, cd. de Puebla, Ometoxtla, Xoxtla, Calpan, Cuautlancingo, Tecuanipan, San Diego, Tlaltennago y Nealtican. También participaron organizaciones como la 28 de octubre, el Consejo Nacional Indígena (CNI) Pueblos Unidos de la región de los Volcanes, Unión de Pueblos y Comunidades contra el basurero; Comité de defensa del Agua de Acuexcomac, y Pueblos Unidos contra la privatización del agua, entre otras más. La gran parte de las y los participantes, eran mujeres y hombres campesinos, con su piel tostada por el sol, con sus manos callosas y sus arrugas, las que portan con gran dignidad y entereza. Orgullosas, orgullosos de ser campesinos y campesinas.

 

Muchas de las y los presentes en la asamblea, fueron también testigos, participantes y defensores de su agua en 1994.  cuando el gobierno del estado, vía el Soapap, les despojó de su agua, para llevarla a la insaciable ciudad de Puebla, con su salvaje urbanización y sus múltiples desarrollos inmobiliarios y grandes centros comerciales, como Angelópolis. En aquel año, el estado era gobernado por Manuel Bartlett y su subsecretario de gobernación, Mario Marín, el gober precioso y el director del SOAPAP, Luis Ontañon León, quien inicio a la borrachera del endeudamiento del SOAPAP que hasta la fecha continúa.

 

En aquel año, el gobierno del estado, el Soapap y Conagua se comprometieron a que cada 3 meses se revisarían los niveles estáticos y dinámicos de los pozos, a fin de comprobar que no estuviesen siendo afectados y en caso de darse tal afectación se suspendería la extracción hasta que la dicha afectación fuese solucionada; los pozos se secaron (Clausula cuarta del convenio) y Las autoridades correspondientes se obligaban a ejecutar labores de reforestación (Clausula séptima del convenio).

 

Actualmente, el centenario y emblemático Ahuehuete que fue símbolo de fertilidad y respeto a la naturaleza de esta comunidad, se está secando, está en fase terminal. 

 

Ni Conagua ni el gobierno de Puebla y mucho menos el Soapap, observan y observaron en aquél año. el principio el artículo 6to. del Convenio 169 de la OIT (Derecho a la consulta libre, previa e informada) y mucho menos el principio precautorio. (El principio se refiere al conjunto de medidas de protección que se adoptan ante una situación en la que existe un riesgo, científicamente posible pero incierto, de infligir un daño a la salud pública o al medio ambiente.)

 

Después de la ceremonia dio inicio una larga ronda de intervenciones y testimonios de las y los representantes de los pueblos y organizaciones, de cómo han sido despojados de su agua, sus territorios y sus bienes comunes. Fue un muy buen ejercicio de memoria e historia colectiva pero también del relato de luchas indígenas exitosas, como la de Olintla, reseñada por el compañero totonaco Miguel Sánchez. Comunidad que luchó en contra de la construcción en su comunidad de una hidroeléctrica que quiso instalar del ecocida Germán Larrea, dueño de Grupo México. Pasando por la denuncia de la grave devastación ambiental en la cuenca Libres-Oriental, que está llevando a cabo Granjas Carroll y otras empresas, en voz de Renato Romero, quién hizo un vehemente llamado a luchar en contra del capitalismo salvaje y a seguir organizándose y movilizarse como pueblos.

Alberto de la Fuente de Calpan, hizo una amplia, muy clara y certera descripción de su lucha en contra del basurero tóxico y la denuncia de las omisiones de las autoridades estatales y ayuntamientos correspondientes para clausurarlo a tiempo. El impacto del basurero tóxico no sólo tiene un impacto al medio ambiente, sino también en la salud. ¿Como piensan las autoridades de los tres niveles de gobierno resarcir el daño al que tienen derecho los habitantes de los municipios afectados, tanto a su medio ambiente como a su salud?

También se hizo la denuncia puntual de la expansión desenfrenada de los desarrolladores inmobiliarios y su colusión con funcionarios municipales que les han dado el permiso y cambio del uso de suelo para especular con la tierra y llevar a cabo la urbanización salvaje -el neolatifundismo urbano- que está dejando sin agua a las comunidades. La compañera Claudia, de San Matías Cocoyotla, realizó una crítica muy puntual a las ideas-espejismo, tales como progreso, desarrollo y modernización que nos están llevando justamente no al cielo y el paraíso, sino al infierno ambiental. Fue una cátedra de voz viva de quienes han sufren y viven cotidianamente la devastación y sobre todo la acumulación de capital por despojo (David Harvey dixit) de su agua, territorios, bosques, saberes y conocimientos tradicionales, bienes comunes, etc.

 

Casi al final de esta ronda, tomó la palabra el defensor del territorio y el agua y ex preso político del Moreno Vallismo, Juan Flores Solís para poner a consideración de la asamblea, tres opciones:

  1. La del presidente auxiliar, quien estuvo presente en la asamblea, que se sintetizaba en: continuar la extracción del agua a cambio de dinero y obras.
  2. La de la comunidad: clausura de los pozos y
  3. La de la Conagua: Dejar abierto un pozo.

En la votación a mano alzada, ganó abrumadoramente por abrumadora mayoría la segunda opción. Antes de la votación, el Presidente Auxiliar, Sr. Darío Tiro Rosas, tomó la palabra para comprometerse a respetar la decisión de la asamblea y firmar en una hoja en blanco su decisión de sumarse al cierre de pozos, lo que le fue reconocido por los ahí presentes.

 

 

Al cuestionársele al presidente auxiliar de un escrito que anduvo circulando un día antes en redes sociales en el que se mencionaba que iba a intervenir la fuerza pública, mencionó que él no lo había redactado y mucho menos, hecho circular en redes. Se deslindó totalmente del escrito de marras y salió a relucir que quién lo había elaborado y difundido, fue el abogado Atilio Peralta, quién meses atrás, había interpuso una denuncia contra el Soapap y Conagua pidiendo la reparación de daños por un monto de 3,500 millones de pesos. Sobre esta denuncia contra Conagua y Soapap, Juan Carlos Flores les informó que dicha denuncia había sido desechada por el Tribunal Administrativo desde hace por lo menos un mes.

 

Antes de la comida, hubo en trabajo en mesas para ver que ruta seguía el movimiento, llegando entre otros, a los siguientes acuerdos:

  • Terminar con el contrato que se hizo con el Soapap y no permitir la extensión del mismo.
  • Reunión en gobernación estatal con Conagua, Profepa y Soapap.
  • La conformación de una coordinadora regional en defensa del agua.
  • La próxima asamblea será el 9 de diciembre en la comunidad de Nealtican, Pue.

En el comunicado de invitación a la Asamblea y difundida a través de la red social Facebook (lunes 5 de noviembre), los organizadores mencionan, entre otras cuestiones, lo siguiente que no tiene desperdicio:

 

Hay una crisis en el campo cholulteca y en nuestros hogares y se llama Agua de Puebla. Desde hace más de 10 años el agua que nos quitan ha sido concesionada a la empresa Agua de Puebla, quien gana millones al día, no perdona al que no tiene para pagar el agua y es la principal fuente de extracción y desecación en la región cholulteca, con los 34 pozos ubicados en San Pedro Cholula, San Andrés Cholula, Nealtican, Cuautlancingo, Coronango y Xoxtla:

 

Miscelánea

 

Lo dicho sobre la elección de la o el presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos. Era una simple farsa y una simulación. Vamos cada vez más, de mal en peor y lo grave, la presencia de un represor como Ardelio Vargas en la designación de la nueva presidente de la CDH. ¿Qué mensaje quieren dar el gobierno saliente y entrante con este acto?

El triunfo de Donald Trump. Un fantasma que pronto correrá por nuestro continente y el mundo gracias al triunfo de Trump y a los oligarcas y plutócratas del Partido Demócrata gringo, el fantasma de la utraderecha y el resurgir de los movimientos fascistas nativos que seguramente saldrán del clóset.