SUSCRIBETE

23 Abril 2024, Puebla, México.

2021 y aquí seguimos… / Malusa Gómez, comunicadora

COVID 19 en 2022 | Crónica | 3.MAR.2021

2021 y aquí seguimos… / Malusa Gómez, comunicadora

Voces en los días del coronavirus

Hace casi un año que nos sentamos a reflexionar, en este mismo espacio, sobre el encierro que cada uno estábamos llevando, y nuestra forma de plantearnos ante el virus, la pandemia, el encierro y un montón de cosa más que la verdad nunca habíamos pensado que nos iban a suceder.

Para mí las palabras cuarentena, toque de queda, pandemia, confinamiento, restricciones de movilidad, cubre bocas eran como de película. Palabras que muchas veces se atravesaron en mi vida en las lecturas, pero que no se me había ocurrido que las experimentaría en carne propia.

El camino personal durante esta pandemia, como el de casi todos, me ha llevado de un lado a otro. Opiniones, posturas, sentimientos y estados de ánimo contradictorios. Yo suelo ser bastante positiva y poco desconfiada, pero tengo que admitir que en esta ocasión más de una vez el tema me ha llevado a puntos complicados, sobre todo cuando pienso en el futuro.

Mi primera postura fue que esto nos movería de tal forma que nos haría cambiar y plantarnos ante la vida desde otro lugar, pero hoy no estoy tan segura, me da la impresión de que a nivel colectivo hemos aprendido bien poco. En corto compartimos con nuestra gente eso en lo que reflexionamos, revaloramos y entendimos con el encierro y falta de libertad. Pero luego, en la práctica, una vez que las medidas se fueron relajando un poco, nos debocamos a hacer lo de siempre, a vivir como siempre, a pensarnos de forma individual y no en colectivo; y la cosa se volvió a salir de control. ¿Qué tiene que pasar para que nos tomemos las cosas en serio y entendamos que así de plano no podemos seguir?

Ojalá tuviera la respuesta, ojalá entendiera en dónde nos equivocamos y a partir de qué periodo las sociedades se empezaron a torcer.

Voces en los días del coronavirus 2020 / Qué espero de este encierro: un mundo más lleno de nosotros/Malusa Gómez, comunicadora

Pero repito, suelo ser positiva y no quiero dejar de serlo. Así que más me vale pensar que los grandes cambios y transformaciones se dan por grupos pequeños y no en masa, o de plano no voy a encontrar el camino por el que quiero caminar.

Una de las cosas que más me ha movido es entender que no hay control por nuestra parte de casi nada, uno manipula su día a día bastante bien y por eso creemos que controlamos nuestra vida.  Hacemos planes, y de repente nos damos cuenta de que no controlamos casi nada y un bicho que ni siquiera podemos ver nos pone al mundo entero en aleta máxima, nos frena y nos domina sin distinción. Creíamos que, si las posibilidades económicas nos los permitían, éramos libres de hacer y deshacer, de viajar, de comprar, consumir a nuestro antojo y entonces, vine el mismo bicho y nos demuestra que no, que ha sido un abuso y que más vale que frenemos o el planeta nos la va a cobrar bien caro.

Creíamos que vivir en la era digital en la cual todo está al alcance de un clic era una suerte, y una vez más el bicho nos demuestra que tampoco está tan padre, que la saturación de información no es nada buena, que la híper comunicación no ayuda tanto, que los “opinólogos” expertos en todo hacen mucho daño y entendemos que tenemos que ser más selectivos con nuestros grupos, con los medios que consultamos y claro más cuidadosos con nuestras opiniones.

En fin, que a nivel personal el bicho me ha ayudado a intentar escribir mi historia desde otro lugar, a entenderme y entender la vida y sus personajes de una forma diferente. La idea es seguir siendo positiva sí, pero más propositiva porque por primera vez me siento parte de ese todo, al que le pasan cosas igual que a todos, entendí el significado de “ver los toros desde la barrera” pero visto desde el otro lado, sin barrera y con el toro pasándome bien cerquita.