diciembre 31, 2025, Puebla, México

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¿Cómo pensar la espiritualidad en pleno siglo XXI? / Juan Carlos Canales

Y sobre la realidad nuestra: el de Armenta, un gobierno marcado por la ineficacia, la carencia de ideas, la demagogia, la corrupción, la opacidad, etc.

Diario de trabajo, 25 de Dic., 20.00 Hs.

I

Si solo estamos determinados por la contingencia de nuestra propia condición, entonces todo asunto humano es relativo, fugaz, igualable. Es lo mismo dejar vivir que dejar morir; cada uno de nosotros es intercambiable y el lazo con la naturaleza también se rompe. Nos hemos desvinculado de lo sagrado definitiva, irremediablemente. En su lugar, el mercado, la técnica, los fundamentalismos, la ciega voluntad de poder. La ciencia ha anulado todo referente a la otredad, en sus distintas dimensiones. El hombre mismo ha ocupado el lugar de Dios.

Cómo encontrar con un conjunto de valores, se preguntaba Camus, que pueda ordenar la vida humana, sin que ese orden, añadiría, se convierta en una cadena, en un lastre para la libertad. Cómo pensar la espiritualidad en pleno siglo XXI, sin renegar, a su vez, de lo que la ciencia y la técnica nos han dado. Esas son las preguntas que han marcado los últimos años de mi vida, y creo que los seguirán marcando hasta el final. J. Canales F

II

Una tarde lluviosa, fría. Además de la lectura, lenta, reposada, en inglés y español, de “Hamlet”, vuelvo a algunas películas que me marcaron en su momento y, como los libros, vuelvo sobre ellas,una y otra vez; el sábado, “ Los cuatrocientos golpes”; anteayer, “Una Eva y dos adanes” , que estoy seguro vi con mis padres. Hoy , “El eterno resplandor de una mente sin recuerdos”, una película que es mucho más que el género que la anuncia, ciencia ficción. No solo es una hermosa historia de amor; es una profunda indagación sobre los mecanismos de la memoria, el olvido, la repetición.

Comida opípara: crema de tomate, ensalada y ese milagro mexicano de una torta de chile chipotle relleno queso . Hacía mucho que no bebía licor y hoy, antes de comer me zampé dos tequilas . El vino va por descontado. Cena: quesos y vino tinto.

III

Leo una nota periodística: “en campaña, Alejandro Armenta prometió respetar la prensa y aceptar la crítica” Hoy, su caso, no solo es lamentable, verdaderamente lamentable, por su actuación frente a Rodolfo Ruiz y e-consulta, convirtiéndolo en un represor al mejor estilo diazordacista sino, en general, por su desempeño como gobernador de Puebla. Un gobierno marcado por la ineficacia, la carencia de ideas, la demagogia, la corrupción, la opacidad, etc. Los ejemplos sobran, desde el vertiginoso aumento de violencia durante el último año , hasta los casos de extorsión en la propia fiscalía, pasando por la conformación de su gabinete, perfilado por la más supina ignorancia , la riqueza inexplicable y frivolidad de su más cercano colaborador, las ligas peligrosas de Armenta con personajes como Monreal o Haces. Lo cierto es que, pese a las campañas publicitarias, la plataforma de Nódica, la autocomplacencia y el narcisismo que despliega en sus conferencias de prensa , Alejandro Armenta ha sido una decepción para los poblanos. Yo mismo pensé durante la campaña que, frente a Ignacio Mier, era la mejor opción, por tratarse de un político joven, con experiencia y con un un futuro que lo obligaría a desempeñar un gobierno mínimamente eficiente. Pero los resultados han sido otros : parece que durante sus muchos años en la administración pública, Alejandro Armenta no aprendió nada y, peor aún, nunca pudo sacudirse la educación sentimental que lo formó : la peor expresión del priismo nacional, el marinismo. Es obvio que su único interlocutor real y quien define el horizonte gubernamental de Alejandro Armenta es López Obrador, ni siquiera, Claudia Sheinbaum y, mucho menos, la entidad y los poblanos. Y es así, como un verdadero cortesano, que Alejandro Armenta forjó su carrera política. A Puebla le esperan cinco años más de un aciago destino, si es que nosotros lo permitimos, si es que nosotros dejamos que ese “ogro”, ya ni siquiera filantrópico, siga creciendo, y acabe arrebatándonos lo que es lo más nuestro, la voz y el espacio público.Como lo hemos señalado varios académicos y periodistas, lo que está en juego en el caso de Rodolfo Ruiz es algo más que la defensa de una persona en concreto, aunque la defensa de una persona- sea quien sea- ante un atropello así es suficiente para emprender una denuncia sin descanso. De salirse con la suya, Alejandro Armenta impondrá el terror como política de estado ante toda crítica y disidencia. Al igual que Gertz Manero, Armenta se aprovechará la fuerza del estado para conseguir sus mezquinos intereses.Está en juego el principio más elemental de la justicia mexicana, la presunción de inocencia . Y el respeto al debido proceso. De imponerse la voluntad del ejecutivo , nuestra vida pública estará marcada por un antes y un después del caso de Rodolfo Ruiz y e- consulta. Y, por eso mismo, su defensa es tarea de todos. Juan Carlos Canales