La visita de Claudia y la contaminación del Atoyac / Gerardo Pérez Muñoz

Si eres neutral en situaciones de injusticia, has elegido el camino del lado del opresor. Desmond Tutu

Cómo sabemos, en su última visita a la entidad de la candidata de Morena, PT y PVEM, Dra. Claudia Shenbum Pardo a la presidencia de la república declaró que el el rescate del Atoyac será una de las prioridades del próximo sexenio y reconoció que es una de las deudas ambientales que se atenderán en el próximo sexenio. Dicha declaración se dio a unos días de la conmemoración del Día Internacional de las Personas Defensoras de los Derechos Humanos y al siguiente día, del 75 aniversario de la conmemoración de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.  

Si está declaración la hubiese hecho la candidata del huipil y la derecha; Xóchitl Gálvez, desde ya, tuviésemos declaraciones incendiarias contra esta señora y su partido acusándola de representar los intereses empresariales y hasta de genocida ambiental; pero como la declaración la hizo la candidata del partido hegemónico, lo que hemos conocido hasta ahora, ha sido un silencio cómplice de medio mundo. Como Salinas, no ven ni oyen lo que se  dice sobre esta y otras problemáticas socioambientales. Asistimos al ¡silencio de las y los inocentes!

Sería importante conocer la opinión de las víctimas y sus familiares sobre esta declaración de la candidata. ¿Sabrá la candidata los estragos a la salud que han tenido los pobladores que viven a orillas del Atoyac y que han sufrido la muerte de una familiar por dicha contaminación? ¿Sabrá del sufrimiento y de la muerte lenta y dolorosa, de niños, jóvenes, mujeres o viejos?  ¿Qué pensarán las personas que habitan en la rivera del Atoyac tienen que esperar para ver si les resuelven su problemática hasta el próximo sexenio. Considero que fue, por decir lo menos, una declaración insensible y desafortunada. Es cierto que Claudia no puede decidir actualmente en el gobierno federal, pero sí. puede gestionar muy bien la intervención de la autoridades federales, estatales  y municipales correspondientes  para que esta situación sea atendida en forma urgente e integral y no sigan pateando el bote.

El río Atoyac y  la Recomendación 10/2017, CNDH

Esta recomendación fue dirigida a las autoridades federales, estatales y municipales). Van algunos datos.

La recomendación de la CNDH esta dirigida a: Gobierno Federal (Comisión Nacional del Agua (Conagua), Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), a los gobiernos estatales de Puebla y Tlaxcala, así como a los gobiernos municipales de San Martín Texmelucan y Huejotzingo de Puebla y Tepetitla de Lardizábal, Nativitas e Ixtacuixtla de Mariano de Matamoros de Tlaxcala.

La cuenca del Atoyac cruza 7 municipios de Tlaxcala y 11 de Puebla en la cual viven aproximadamente un poco más de tres millones de habitantes.

La subcuenca del río Atoyac tiene una superficie total de 2,189.4 km2, de esta superficie poco más de tres cuartas partes (75.6%) se ubica en Puebla; y el 17.0% de Tlaxcala. Asociación Mexicana de Ingeniería Ciencia y Gestión Ambiental (AMICA).

El Atoyac, segundo río más contaminado en México (Greenpeace.)

La contaminación del río a gran escala comenzó en 1969, cuando se instaló el Complejo Petroquímico Independencia de Petróleos Mexicanos (Pemex); posteriormente, se crearon tres corredores industriales, que hasta la fecha vierten desechos de las industrias alimenticia, textil, química, petroquímica, automotriz, papelera, de hierro y acero, farmacéutica, metalmecánica y siderúrgica, entre otras (María Alejandra Elizabeth Olvera Carbajal, ENCB-IPN, La Jornada del Campo,20 de mayo de 2017)

Enfermedades causadas por la contaminación del Atoyac

Cáncer, anemia, púrpura trombocitopenica, leucopenia, malformaciones congénitas, enfermedades renales, deficiencia en el desarrollo del tubo neural, afectación de la medula ósea, infecciones gastrointestinales, tumores cerebrales, entre otras  (Recomendación 10/2017).

Contaminantes

Plastificantes, pesticidas (Aldrin) y compuestos policíclicos aromáticos, como el trifenilo y el crisano; así como con compuestos volátiles como el tolueno, hexano y hexclorobeneno, usados en las industrias textiles, farmacéuticas y automotrices; y tintes y colorantes provenientes de las textileras que tornan de diferentes colores el río y que afectan la fotosíntesis de los organismos; arsénico que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), en contacto con el agua, causa cáncer de vejiga, pulmón y piel. (CNDH/Instituto de Ecología de la UNAM)

¿Conocerá la Dra. Sheinbaum y sus asesores el informe de la CNDH sobre el Atoyac? ¿Conocerá acaso el dato dado a conocer por parte del  Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI)? que indica que 11 mil 343 personas que vivían cerca del río Atoyac entre 2015 y 2019 murieron de diferentes tipos de cáncer, 3 mil 750 fallecieron por cáncer de colon; mil 348 por cáncer en la sangre y mil 148 por cáncer en órganos genitales femeninos. ¿Conocerá dicha información la Dra. Sheinbum y sus asesores?

De acuerdo a Alejandra Méndez, directora del Centro Fray Julián Garcés,  cada dos horas y media una persona falleció por enfermedades asociadas a la contaminación, además hay otras investigaciones que arrojan que las personas que viven cerca del río Atoyac tienen 200 veces más probabilidades de enfermar de cáncer respecto a otras partes del país. ¿Realmente creen y piensan las y los políticos que estas personas pueden seguir esperando hasta el próximo sexenio para resolver su situación de fondo? ¿Sabrá Claudia Sheinbum cuantos años llevan estas personas esperando que las autoridades, federales, estatales y municipales, intervengan y resuelvan su situación y problemática de fondo? Lo que ha habido hasta ahora, son autoridades omisas, verdaderos genocidas ambientales.

En octubre del 2018 y en el marco de la XII Audiencia Pública del Tribunal Latinoamericano del Agua (TLA) el jurado del mismo responsabilizó al Estado mexicano, que al promover un modelo urbano, industrial y agroproductivo y extractivista que favorece el interés privado por encima del público, ha conllevado al deterioro de la calidad y cantidad del agua en los ríos, cuerpos de agua y acuíferos, con graves impactos en la salud humana, la producción de alimentos y la conservación de los ecosistemas y, como consecuencia, ha incumplido en sus obligaciones de respetar, garantizar y proteger los derechos humanos al agua y saneamiento, a la salud, a la alimentación, a la vivienda al medio ambiente y sobre todo ha afectado a los grupos sociales más vulnerables como son los pueblos indígenas y campesinos. El caso de la contaminación del Atoyac ya había sido presentado y juzgado en el 2006 por el mismo Tribunal quién emitió una sentencia favorable para las comunidades, misma que fue ignorada por el gobierno mexicano. Omisión e impunidad, ha sido la respuesta oficial hasta la fecha.

En el Primer informe Estratégico Cuenca del alto Atoyac (Tlaxcala y Puebla): Región de Emergencia Ambiental la Dra. Diana Casique Aguirre, integrante del equipo del Proyecto Nacional de Investigación e Incidencia de Leucemia Infantil señaló lo siguiente: En los últimos años se ha observado un incremento considerable de casos de enfermedad renal crónica (ERC) en jóvenes y de leucemia infantil en los municipios de la Cuenca del Alto Atoyac. También expuso que desde 1990, Puebla y Tlaxcala tienen las tasas más altas de mortalidad por enfermedad renal crónica (ERC) en el país entre la población joven Esa es la realidad que viven cientos y miles de niños y jóvenes de Puebla y Tlaxcala que habitan los márgenes de la cuenca del Atoyac. la Dra. Casique también mencionó lo siguiente: los municipios con mayor incidencia de leucemias agudas en población menor de 20 años, son: Tlatlauquitepec, Chiautempan, Tlahuapan, Tlahuapan, San Pedro Cholula, Acajete, Teziutlán, San Martín Texmelucan, San Pablo del Monte, Chignahuapan y Amozoc. La Dra. expuso que existe una estrecha correlación espacial entre tasas de mortalidad por leucemias agudas y la contaminación de metales y arsénico que detecto en Sta Clara Ocoyucan, Coronango, Juan C.Bonilla, Puebla, San Andrés Cholula, Papalotla y Tenancingo. Apuntó que los niños y jóvenes son la población más afectada por el nivel de contaminación que presenta el Río Atoyac. ¡Cuánta hipocresía y demagogia destilan los políticos y funcionarios al decir, con voz fingida, que el presente y futuro de los niños y jóvenes son su preocupación central! y con sus actos y hechos han violado en forma flagrante y sistemática el párrafo noveno del artículo 4to constitucional (interés superior de la niñez) y la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (LGDNNA).

¡Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces! (Lucas 6:43-44 ) y ya ni se diga de la violación de los párrafos tercero, cuarto, quinto y sexto del mismo artículo cuarto constitucional.

Da la impresión que al actual gobierno autodenominado humanista poco le interesa la grave contaminación del agua, aire y suelo y la grave devastación ambiental que padecemos a nivel nacional con fuete impacto a nuestra salud, alimentación, y agua pura. En Puebla tenemos muchas zonas de emergencia ambiental que merecen un artículo aparte. Queda claro que en el Puebla hemos tenido hasta la fecha gobiernos supeditados a los intereses económicos, a los poderes fácticos. Han sido gobiernos (federal, estatales y municipales) omisos en el caso del Atoyac y la muerte de niñas y jovencitas y jovencitos y de animales acuáticos y de flora. Una cuestión que llama la atención, es que en el caso de Puebla, ni por equivocación se ha mencionado por parte del gobierno actual y los anteriores, de la realización de una auditoría integral de los recursos públicos que se han canalizado para ¿sanear? el Atoyac; desde el gobierno de Manuel Bartlett hasta la fecha, pasando por el proyecto del gober precioso llamado La Carta de la Tierra y al que según esto, se le destinaron 5 mil millones de pesos. Esta auditoría se debería que extender hasta la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento del Estado de Puebla (CEAS-Pue) y el SOAPAP. No podemos perder de vista que de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Calidad e Impacto Gubernamental (ENCIG) dada a conocer recientemente, Puebla ocupa el nada honroso segundo lugar en corrupción a nivel nacional.

Urge tener una sociedad plenamente informada y crítica con gobiernos sensibles que tengan como prioridad en sus agendas, la atención y solución a las diversas problemáticas socioamabientales; desafortunadamente vemos, en general, salvo algunas islas e islotes sociales, una sociedad apática que no se involucra en la defensa de causas que, como esta, en el fondo es una lucha por la vida. Seguramente durante la campaña electoral que ya tenemos encima, volveremos a escuchar por parte de las y los candidatos, la promesa del saneamiento del Atoyac, demagogia pura y dura. Es urgente impulsar la creación de Fiscalías y tribunales-federal y estatales-especializados en delitos ambientales. Ya basta de foros, reuniones o diagnósticos sobre diagnósticos, es hora de actuar y meter en cintura las industria, no de simular.

Bien dicen las y los compañeros de la Sección XXII de la CNTE que

Gobierne quien gobierne, los derechos se defienden.

Miscelánea

Terminó la LXV legislatura y nuevamente de pateo la aprobación de una nueva Ley General de Aguas y la reforma laboral de las 40 hrs.

¿Primero los pobles?