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11 Mayo 2024, Puebla, México.

A seis años de los terremotos de 2017: Conclusiones / Rutilia Amigón Amigón

Gobierno /Cultura | Investigación | 18.NOV.2023

A seis años de los terremotos de 2017: Conclusiones / Rutilia Amigón Amigón

Quinta de 5 partes

(Foto de portadilla. Bóveda brazo norte en el templo de la comunidad de Albino Zertuche. La imagen del 28 de septiembre de 2017 ofrece una clara idea de la destrucción provocada por el terremoto del 19 de septiembre de ese año).

Entre las 154 obras encomendadas al GOBP y 33 al INAH hay lamentables omisiones. Es el caso del exconvento agustino en Chiautla de Tapia, erigido a mediados del siglo XVI, que representó casi el final de la ruta de fundaciones conventuales que desde la ciudad de México y cruzando por el actual estado de Morelos, habría de llegar al de Guerrero. Este relevante conjunto mixteco, presenta un significativo avance, sobre todo en el claustro, pero enfrentó (como otras obras) los efectos del agotamiento de la prima del seguro adquirido por el INAH, razón por la cual no se alcanzó a concluir.

Existe avance de 80% en reconstrucción del templo de Chiautla

Exconvento agustino en Chiautla de Tapia. Imagen del mes de agosto de 2019. Municipios Puebla.

En el caso del templo de San Lucas, en Tzicatlán, un inmueble con una bella portada, ornamentada en argamasa con profusión de motivos vegetales y figuras humanas, lo cual llevó a Constantino Reyes Valerio incluirla en el grupo de inmuebles en la región que denominó Triada Barroca del Sur, aún tiene varios pendientes de obra por resolver. Así también el templo de San Juan Bautista en la localidad y cabecera municipal de Teotlalco, que tampoco ha recibido recursos por parte del INAH ni de otros.

El templo de San Juan, en la localidad de San Juan del Río, perteneciente al municipio de Chiautla, continúa con una torre dañada que es preciso consolidar, además de otros pendientes de menor consideración. El templo de Santiago Apóstol en Coacalco, municipio de Xicotlán, también mantiene algunos pendientes. Y en todos los inmuebles mencionados los bienes muebles no han recibido atención por parte del INAH.

En aquel mensaje de los inicios de 2019 que Diego Prieto dirigió a los trabajadores, habló de un plan maestro para atender los daños al patrimonio y entre otras cosas dijo: “…estamos en el camino de avanzar.” Sucedió lo contrario, porque para entonces ya se había excluido del financiamiento del seguro a inmuebles que estaban en obra, debido al supuesto agotamiento de la prima y muchos trabajos se suspendieron. Albergábamos la esperanza de que los recursos del Fonden cambiaran el panorama; aunque todo empeoró.

La serie de siete entregas titulada Patrimonio en ruinas, de las periodistas Carmen García Bermejo y Thelma Gómez Durán, reveló los principales aspectos de la compleja problemática asociada con los sismos de 2017 y permite entender las causas del rezago en el resarcimiento de los daños, así como la penosa situación en la que se encuentra todavía buena parte del patrimonio afectado por los sismos de 2017.

Ante la difusión de esa investigación, Prieto, reaccionó ofreciendo una vez más cifras generales y negando que se realizaran contrataciones con empresas sin experiencia en restauración. Es más, el instituto lo fomentó ya que a los supervisores nos impusieron la responsabilidad de invitar a constructores a sumarse a esas tareas. Además, negó que hayan decidido darles prioridad a los templos con daños menores. Pero están comprobados ambos hechos. (quintoelab.org) INAH responde a críticas sobre restauración de monumentos afectados por sismos de 2017 | Aristegui Noticias .” (msn.com).

Hoy en día está sucediendo algo similar al respecto de la participación de constructores sin experiencia en el ramo de la restauración, basta ver con quienes se contratan las obras y sus currículos para confirmarlo. Y empeora las cosas la premura impuesta a los trabajos, debido a lo cual no se dispone de tiempo para capacitación.

Reitero, los templos con daños menores sí fueron una prioridad impuesta por las autoridades desde los inicios. Hasta hoy, sin embargo, no se reconoce que ello y otros equívocos favorecieron el estancamiento de los trabajos de resarcimiento de daños en inmuebles patrimoniales, durante los últimos cuatro años. En efecto, se atendieron inmuebles con daños moderados y severos, aunque no en forma preferente. Tal política de darle preferencia a los templos menos dañados la cuestionamos algunos.

Por último, con respecto a los comentarios de autoridades del CINAHP en el sentido de que ya no formo parte de ese centro de trabajo, quiero aclarar que mientras el Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje no falle lo contrario en el juicio que promoví desde 2022, a raíz del acoso laboral y represalias que he sufrido por parte de autoridades del instituto, continúo adscrita al Centro INAH Puebla.

Por todo lo expuesto, es que se considera que, para varios inmuebles y muebles, sobre todo los que resultaron con daños severos, la fase de intervención actual no representa una oportunidad para revertir el estado en el que estos se encuentran. No existen las condiciones, en lo que respecta a personal capacitado ni el tiempo, para llevar a cabo correctamente los trabajos. Y el reducido plazo que se fijó para ello es más corto aún, por el rezago de las contrataciones y la tardanza en iniciar las obras. Por tanto, los recursos públicos asignados esta vez para atender el patrimonio dañado, podrían resultar en un dispendio.

El presidente de la República debe entender que, por el bien de todos, no es prudente apresurar los trabajos en los inmuebles con daños severos, incluso ni en los que tienen daños moderados, para concluirlos en diciembre de 2023. Insistir en ello afectará la calidad de los trabajos, repercutirá en la creación de riesgos y en la respuesta del bien patrimonial ante un nuevo sismo de consideración.  Por tanto, es esencial que se busquen los recursos legales para extender los plazos de ejecución. Y eso es tarea que deben asumir el gobernador de Puebla y el titular del INAH.

Los afanes de Céspedes y Prieto de “no fallarle al Presidente” exhiben el predominio de su interés político por encima de su interés en la recuperación del patrimonio lo cual nos remite al costoso error de los inicios de darle prioridad a los inmuebles con daños menores, para quedar bien con Enrique Peña Nieto, presidente de México en 2017 cuando el sismo dañó nuestro inmenso patrimonio.

Por otro lado, Prieto Hernández y su equipo de funcionarios involucrados en los asuntos de los sismos, deben rendir cuentas sobre tantas decisiones erradas e instrucciones equivocadas, así como irregularidades que repercutieron en el rezago de los trabajos de resarcimiento de daños en el patrimonio. Deben explicar por qué al día de hoy en el INAH y el CINAHP prevalece el desorden y la improvisación acerca de los asuntos de los sismos (los hechos y circunstancias narrados aquí son prueba de ello). Y deben informar con transparencia sobre los recursos del erario y de terceros que recibieron y aseguran haber aplicado.

 

25 de octubre de 2023